Sigue la temporada seca en la mayor parte del país y eso propicia salir a caminar, a hacer ejercicio en las noches, ir a la playa, salir al cine, o asistir a un partido de fútbol; también entraron las clases en colegios nocturnos, por lo que aumenta la circulación en las noches y ello conlleva tomar medidas preventivas como actores viales.
Así, el director de la Policía de Tránsito, Oswaldo Miranda Víquez, aprovechó para recordar algunas conductas viales que deben respetarse, o que son adecuadas, para reducir riesgos al desplazarse en las horas de oscuridad, sea como peatón, conductor, ciclista y hasta como pasajero.
En el caso puntual de los semáforos, la Ley de Tránsito especifica que, entre las 10 pm y las 5 am, estos dispositivos funcionan como Altos. Es decir, un conductor llega al semáforo y, si está en rojo, puede verificar que no vienen vehículos ni que están pasando peatones y continuar, con el debido cuidado. No es necesario esperar a que se ponga en verde.
Asimismo, otro elemento que no suele ser muy conocido es que las luces de los vehículos deben encenderse entre las 6 de la tarde y las 6 de la mañana.
Al respecto, Miranda recalcó que algunos conductores a veces se les olvida encenderlas; pero el caso más habitual, señaló, es ver vehículos a las 5:14, a las 5:31, a las 5:44 de la mañana con las luces apagadas, pese a que todavía está oscuro, como ocurre actualmente en el Valle Central. Esto es un error, porque no es optativo encenderlas o no, es obligatorio hasta las 6 de la mañana.
Sobre ese mismo tema, aunque ya esté claro es obligación mantenerlas encendidas hasta las 6 de la mañana, no puede ser la percepción de cada conductor de que “está claro” la razón para apagarlas. Más aún, recalcó el funcionario, las luces no son solo para ver el camino, son también para hacerse visibles.
La disposición aplica también, como vehículo que es, para las bicicletas.
De igual manera, se hace una respetuosa excitativa a los conductores, para que si tienen limitaciones visuales que les dificulte la conducción durante la noche, que eviten hacerlo.
“A veces por vanidad, no queremos aceptar que nos cuesta ver en las noches, o sabiendo que nos cuesta ver, preferimos no ponernos los lentes, porque no nos gusta que nos vean con ellos. Entender que la seguridad vial, propia y de otros, debe ser la principal consideración al conducir es vital” agregó Miranda.
Por otro lado, los vehículos de carga que lleven mercancías que se salgan del vehículo, deben llevar banderas rojas en ese producto para que sirva de alerta, pero si las transportan de noche también deben colocarles dispositivos proyectores de luz, para hacer más visible esa carga salida.
Respecto al transporte público, durante la noche, los autobuses de ruta deben llevar las luces internas de la unidad encendidas. Los pasajeros tienen derecho a exigirlo.
En cuando a los peatones y a los mismos ciclistas, la recomendación es la de siempre: hacerse visibles mediante el uso de ropa clara o vestimenta especial que refleje la luz, como los chalecos, cintas o cualquier otro aditamento. Esta recomendación tiene especial valor en esta época de pocas lluvias, en las que las personas salen a realizar actividad física.